Euphoria
El retrato sin filtros de los adolescentes del siglo XXI

Para algunos puede sonar exagerado; para otros, servir como una suerte de advertencia para los más recatados y conservadores. Lo cierto es que lo primero que hay que decir de Euphoria, la aplaudida serie de HBO, es que presenta sin tapujos la realidad de los adolescentes del siglo XXI.

La serie es provocadora, pero no efectista, y se atreve a retratar sin filtros la vida de algunos adolescentes, esos que la pasan mal, que no tienen una vida de sueños. Ahí están los trans, los que tienen problemas con las drogas, los hijos de padres dañinos, los que son acosados en el colegio.

En sus ocho episodios, saca a flote conflictos de identidad, hipersexualización y el uso indiscriminado de drogas y de las redes sociales que caracterizan a la juventud actual. Una a la que la serie no le pone etiquetas.

En Euphoria, estos chicos no son buenos ni malos, mejores o peores que los de otras generaciones. Simplemente son, de acuerdo al mundo que les toca vivir.

Rue y Jules

El personaje central de Euphoria es Rue (interpretada por Zendaya, joven actriz y cantante de gran proyección), una chica que vuelve al colegio después de haber pasado por un tratamiento de desintoxicación.

Todo se relata desde su perspectiva y de cómo su vida se va entrelazando con la de sus compañeros de curso, todos aproblemados, como ella, por alguna razón. Desde una relación de pareja tóxica, hasta el cyberbullying, pasando por el siempre difícil despertar sexual.

Todo mejora (¿o empeora?) cuando Rue se cruza con Jules (interpretada por la muy rubia y divertida Hunter Schafer), una chica trans atormentada y vulnerable que se convierte en su inseparable.

Ambas son el corazón de una serie adictiva, tanto por las historias que presenta, como por su factura, de las más interesantes y atrevidas del último tiempo. Una mezcla perfecta entre realismo y ensoñación tan bien lograda que es capaz de mostrar en una sola escena lo que están haciendo más de 10 personajes en un parque de entretenciones.

Ojo también con la banda sonora, que contextualiza de manera perfecta cada momento con joyitas de antología en la voz de íconos como Beyoncé, Madonna, ANOHNI, Rosalía y Drake, quien, además, es uno de los productores de la serie.

Euphoria es capaz de mostrar sin remilgos ni prejuicios que el nuevo milenio trajo cosas buenas, como la empatía y la autenticidad, pero también otras que no resultan beneficiosas para quienes habitan por estos años el planeta Tierra.

Una producción perfecta para los jóvenes, pero también para esos adultos que quieren mantenerse actualizados y recordar su propia juventud, con similitudes y diferencias respecto de la generación actual.

Muy recomendable, en síntesis, salvo para niños y uno que otro mojigato, que podría espantarse con algunas escenas especialmente descarnadas.

La revolución del maquillaje

Uno de los elementos visuales más potentes de Euphoria son los llamativos make up de los personajes. Pegatinas metálicas, colores neón flúor y cristales. Lágrimas brillantes, ojos ahumados y miradas multicolor.

Distanciándose del recato, los jóvenes de hoy utilizan los cosméticos para expresar su individualidad.

La serie explora de lleno estas nuevas apariencias, aprovechando el maquillaje como un elemento narrativo que tiene una presencia central en el curso de la trama.

Esta jugada estética ha inspirado a numerosas de personas alrededor del mundo, quienes imitan la tendencia de Euphoria y se han atrevido con maquillajes más arriesgados.

Al respecto, la maquilladora de la serie, Doniella Davy, declaró a Vogue México: “En Euphoria, buscamos romper con todos los cánones de belleza convencionales. Es una tontería creer que no puedes bajar al supermercado maquillada con glitter rosa. […] La serie tiene la fuerza suficiente como para impulsar a los jóvenes a ser auténticos y expresarse”.

¿Dónde ver Euphoria?

La primera temporada de la serie está disponible para ser visualizada en HBO GO.